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NUEVA YORK.- La variante ómicron, de rápida evolución, puede causar una enfermedad menos grave en promedio, pero las muertes por covid-19 en EE. UU. están aumentando y los modelos pronostican que podrían morir entre 50,000 y 300,000 estadounidenses más para cuando la ola disminuya a mediados de marzo.
La media móvil de siete días de nuevas muertes por covid-19 en los Estados Unidos ha tendido a aumentar desde mediados de noviembre, alcanzando casi 1,700 el 17 de enero, todavía por debajo del pico de 3,300 en enero de 2021.
Las muertes por covid-19 entre los residentes de residencias de ancianos comenzaron a aumentar ligeramente hace dos semanas, aunque todavía a una tasa 10 veces menor que el año pasado, antes de que la mayoría de los residentes fueran vacunados.
A pesar de los indicios de que ómicron causa una enfermedad más leve por término medio, el nivel de infección sin precedentes que se está extendiendo por el país, con casos que siguen aumentando en muchos estados, significa que muchas personas vulnerables enfermarán gravemente. Si se cumple el extremo superior de las proyecciones, el total de muertes por covid-19 en Estados Unidos superaría el millón a principios de la primavera.
«Todavía va a morir mucha gente debido a lo transmisible que ha sido el ómicron», dijo el epidemiólogo de la Universidad del Sur de Florida Jason Salemi. «Lamentablemente, va a empeorar antes de mejorar».
Las morgues están empezando a quedarse sin espacio en el condado de Johnson, Kansas, dijo el Dr. Sanmi Areola, director del departamento de salud. Más de 30 residentes han muerto en el condado este año, la gran mayoría de ellos sin vacunar.
Pero la noción de que una variante generalmente menos grave podría seguir cobrándose la vida de miles de personas ha sido difícil de transmitir para los expertos en salud. Las matemáticas -que un pequeño porcentaje de un número muy alto de infecciones puede producir un número muy alto de muertes- son difíciles de visualizar.
«En general, va a haber más gente enferma, aunque uno, como individuo, tenga menos posibilidades de enfermar», dijo Katriona Shea, de la Universidad Estatal de Pensilvania, que codirige un equipo que reúne varios modelos de pandemia y comparte las proyecciones combinadas con la Casa Blanca.
