Boston se ha encargado de tirar por el suelo toda manifestación que desde el inicio del entrenamiento le daba para quedarse fuera del gran baile de la postemporada que ahora disfruta.
Tras eliminar a los Yankees en el partido decisivo por el comodín (wild card) de la Liga Americana, los Medias Rojas continuaron con su marcha imparable para llevarse de paso a los Rays de Tampa, el equipo de mejor marca en el circuito con 102-60. Ambos enterrados en el mismo escenario del Fenway Park.
Álex Cora está de regreso como dirigente y por igual regresó la química ganadora a los campeones de la contienda de 2018, precisamente con el boricua al mando. Yankees y Rays, en el papel, lucían mejores conjuntos, pero ese es el béisbol, un terreno movedizo en el que se hunden los pronósticos.
Un conocedor del juego, de la línea de esos zorros que durante el partido mueven piezas sin que se les apriete el pecho, Cora también motiva sus tropas y obtiene un rendimiento mejor de lo esperado.