Vivir sin acceso a agua potable. Ese ha sido el drama cotidiano, y que se ha extendido por largos años, de una parte de los comunitarios que viven en el sector Los Gringos, situado en el municipio Bajos de Haina, provincia San Cristóbal.
AllÃ, el agua está por todos lados, menos en las tuberÃas de las casas, según denunciaron comunitarios a ListÃn Diario. Por las orillas de las aceras, el lÃquido corre sin ningún control, un desperdicio palpable ante los ojos de quienes no lo reciben.
“Da pena y vergüenza que aquà (en Los Gringos) no haya un acueducto. Aquà nunca ha habido agua”, deploró Juan RamÃrez, con un tono muy molesto.
Para rematar su comentario, culpó a los funcionarios municipales de ser unos “irresponsables” por no buscar soluciones para mejorar la calidad de vida de los comunitarios.
La falta de agua potable ha representado un gasto económico adicional y elevado para los vecinos. Y es que para obtener el lÃquido deben auxiliarse de los famosos “camiones de agua”, un servicio que cuesta entre RD$600 y RD$650.
Las familias afectadas se ven en la necesidad de almacenar el lÃquido en tanques o cubetas, muchas sin la debida protección.
Esa es una práctica que puede desencadenar la producción de mosquitos transmisores de dengue y algunas enfermedades, como cólera, según las autoridades sanitarias.
Solo un tanque de agua cuesta RD$75, precisó Silvia Altagracia Castillo, una vecina que vive en Los Gringos desde 1982. Silvia dijo que nadie ha logrado instalar un sistema de distribución de agua potable eficiente.
“(Estamos) pasando trabajo. Queremos a la Corporación del Acueducto y Alcantarillado de Santo Domingo, quien sea, para que nos ayude”, exigió Silvia desde la puerta de su casa.
En el patio de su hogar, Silvia guarda agua en al menos seis tanques y una cubeta pequeña. Con esa cantidad, se asegura por más de una semana.
El lÃquido almacenado lo utiliza tanto para lavar los utensilios de la cocina, lavar la ropa, asear la casa e, incluso, para que los miembros de su familia puedan bañarse.
Silvia, sin embargo, calificó el agua que venden las empresas de “mala”, ya que, al bañarse, su cuerpo suele mantenerse lleno de ronchas y con hormigueo.
Para mantener el abastecimiento, la comunidad ha aplicado un método de reserva que funciona cada semana y por rotación: al vecino que le toque, asume la responsabilidad de comprar el agua que sea necesaria para proveerla a los demás.
Asà lo explicó Vladimir Méndez en conversación con este diario, quien le exigió al Gobierno intervenir con urgencia el sector Los Gringos: “Necesitamos alguien que venga en auxilio de nosotros. Que nos ayude”.
“Esa es la única problemática que tenemos. Y eso es necesidad, el agua; porque sin ella no podemos hacer nuestras necesidades. Nos gustarÃa que nos ayuden”, agregó Méndez.
ListÃn Diario recorrió la demarcación –situada a unos 48 minutos de distancia del Distrito Nacional– el pasado martes 17, dÃa en el que el presidente Luis Abinader arribó a Bajos de Haina, donde inauguró cuatro esferas para el depósito de gas licuado de petróleo (GLP) en la RefinerÃa Dominicana de Petróleo (Refidomsa).
SISTEMA DE AGUA
Tras participar en un Consejo de Gobierno, en noviembre, el director del Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (Inapa), Wellington Arnaud, mencionó a Bajos de Haina y Los Gringos entre las comunidades que son beneficiadas por un sistema de agua potable y saneamiento.

Moradores de Los Gringos buscan abastecerse del lÃquido en galones y comprando camiones con agua.
“Estamos ejecutando 12 sistemas de agua y dos de siete proyectos de saneamiento programados
“Estamos ejecutando 12 sistemas de agua y dos de siete proyectos de saneamiento programados para 2024-2028", dijo Arnaud.