REGIÓN ENRIQUILLO
Se trata de una situación que añade un nuevo ingrediente a la difícil situación socioeconómica que viven comunidades de las provincias que conforman la Región Enriquillo.
RECUERDOS EN JIMANÍ
En Jimaní, la ciudad cabecera de la provincia Independencia, el desbordamiento del río Blanco recordó a sus residentes el desastre ocurrido la madrugada del 24 de mayo de 2004, hace 19 años, que sepultó al sector “La 40”, con decenas muertos y cuantiosos daños materiales.
Ahora, los efectos de los daños que produjeron las lluvias viernes y el día sábado, hasta el momento no se cuantifican y anima un poco a sectores vulnerados que el gobierno se interese por la provincia.
Las fuertes precipitaciones dañaron puentes, los tramos carreteros Jimaní-Distrito Municipal Boca de Cachón-La Descubierta, viviendas en el distrito El Limón, cultivos e instalaciones para el riego.
BARAHONA
En esta provincia se reportaron pérdidas millonarias a productores de El Peñón y zonas aledañas. Según reportes, el desbordamiento del canal Trujillo abnegó más de 5,000 tareas de plátano, guineo, rulo y otros rubros agrícolas.
A la salida de la comunidad Las Clavellinas, las lluvias destruyeron aceras y contenes construidos hace poco, casas inundadas y el tránsito interrumpido en la carretera internacional que comunica el país con Haití.
También afectaron el casco urbano de Tamayo, donde al menos 28 sufrieron muchos daños.
En Neiba, el desborde de arroyos inundó gran parte de la población, incluyendo la vivienda del alcalde municipal, Arístides Medina, destruyó contenes recién construidos, y levantó gran parte de la capa asfáltica.
El centro de Villa Jaragua sufrió los embates de las lluvias y en el ares de salida a Las Clavellinas, las arrancaron aceras y contenes construidos, además de casas inundadas y el transito varado en esta carretera internacional que comunica con el Haití.